La selva del Darién está entre Colombia y Panamá. Es un bosque espeso y espeso de unos 20.000 km cuadrados que fue explorado por vez primera por el explorador español Vasco Núñez de Balboa hace unos 500 años. Es una región dañina puesto que nos puede asombrar con precipitaciones intensas, vientos apabullantes y fauna dañina. La selva asimismo es famosa por ser útil como cobijo para las guerrillas colombianas. No obstante, asimismo hay un lado bello, lleno de una extensa variedad de preciosas flores y una pluralidad de animales únicos y pájaros coloridos.
Naturaleza salvaje
La mayor parte de los migrantes comienzan su viaje hacia el Darién en el pequeño pueblo de Necoclí, en Chocó, y desde allí toman la lancha vía Capurganá, asimismo famosa como “la puerta de entrada al infierno selvático”. La ruta es dificultosa puesto que no hay rutas, con lo que los conjuntos acostumbran a caminar por caminos estrechos y terrenos pantanosos.
Entre los causantes mucho más subestimados por los pasajeros es el calor. Varios sobrevivientes la han calificado de asfixiante, en tanto que fue la causante de muchas muertes por infartos y también insuficiencia respiratoria tras múltiples días de marcha sin frenos. El peligro asimismo es importante gracias a la abundancia de vida silvestre, víboras y también insectos venenosos. En un vídeo que se realizó viral en las comunidades, un hombre cuenta de qué manera le costaba reposar por las noches debido al estruendos de decenas y decenas de monos que chillaban a su alrededor.
Riesgos
Se calcula que el 71% de los migrantes que han cruzado la Selva del Darién desde enero de 2022 son de nacionalidad venezolana. No obstante, quienes consiguen atravesar la selva llegan a las estaciones migratorias con mala salud, varios con lesiones por caídas, picaduras de insectos o animales venenosos, ciertos asimismo reportan diarrea tras tomar el agua de los ríos, desnutrición y deshidratación.
Estos componentes, adjuntado con el riesgo que representan las corrientes de los ríos y los conjuntos delincuentes que habitan la selva, son ciertas de las razones por las cuales asimismo hay un porcentaje de migrantes que mueren en el sendero.
Cruzando continentes
El año pasado 133.000 migrantes hicieron esta travesía y se calcula que van a ser aún mucho más en 2022. La mayor parte llega al costado colombiano del Tapón del Darién mediante otro país latinoamericano, en general en dirección norte hacia los USA. Una enorme proporción de quienes combaten este arriesgado cruce son haitianos, seguidos numéricamente por cubanos y de venezuela. Pero otros vienen de Camerún y Angola en África, o de Pakistán y Sri Lanka en Asia. Llegan aquí tras un duro viaje, que de manera frecuente empieza aprendiendo sobre ciertos países sudamericanos con leyes de inmigración laxas mediante las comunidades.
“Hay unas condiciones que han tolerado la presencia de esta ruta”, afirma Federico. “Uno es el cierre total de las fronteras de Europa. Los inmigrantes que procuran llegar a Europa acaban en campos de detención, se ahogan en el mar Mediterráneo o están con óbices en alguna parte». Conforme las rutas a Europa se vuelven menos alcanzables, los inmigrantes del sur se han basado en admitir mucho más políticas en pos de la inmigración en países como Ecuador, usar Brasil y Perú.